domingo, 15 de noviembre de 2015

Resúmenes Esther Bernalte


RESUMEN PRÁCTICA 5
OSTOMÍAS


En esta práctica el profesor comenzó explicando en qué consisten las ostomías (apertura artificial de un órgano interno en la superficie del cuerpo, creada quirúrgicamente) y los tipos de ostomías que existen (traqueal, urinaria y de intestino, bien sean de nutrición o de eliminación).

Seguidamente vimos un vídeo en el cual una paciente mostraba cómo se cuida ella normalmente su colostomía, como se quitaba el apósito, se irrigaba interiormente con agua, se colocab la bolsa, defecaba, se limpiaba y se colocaba un nuevo apósito.

A continuación observamos algunos de los diferentes tipos de apósitos que existen para el cuidado de las ostomías según el tipo de ostomía, la finalidad de ésta y la edad del paciente.

Resúmenes Esther Bernalte


RESUMEN PRÁCTICA 4
SONDAJE NASOGÁSTRICO
En esta cuarta práctica aprendimos cómo realizar un sondaje nasogástrico, primero vimos un video explicativo con un paciente y después realizamos nosotros la técnica con un muñeco. El vídeo explicaba los siguientes pasos:
1.Primero colocaremos al paciente en posición Fowler mientras le explicamos el proceso que vamos a realizarle, aclarando las dudas que pudiera tener, ganándonos su confianza y pidiéndole su colaboración.
2.Con los guantes ya colocados, colocaremos el paño en su tórax y tendremos preparado ya el material que utilizaremos: sonda nasogástrica adecuada para el tipo de sondaje y finalidad, lubricante, bolsa colectora, pinzas, vaso con agua y pajita.
3.Elegiremos la fosa nasal más adecuada para introducir la sonda, para ello le pediremos al paciente que respire por ambas haciendo presión en la fosa contraria en cada momento y elegiremos aquella que permita introducir la sonda más fácilmente.
4.Mediremos la longitud de la sonda a introducir, para ello mediremos la longitud desde la punta de la nariz al lóbulo de la oreja y desde ahí hasta el esternón o apófisis xifoides. Marcaremos esta longitud que nos ayudará a saber cuándo la sonda se encuentra en el interior del estómago.
5.Lubricaremos el extremo distal de la sonda y seguidamente la introduciremos por la fosa nasal que hayamos elegido. Cuando la sonda llegue a la nasofaringe es muy probable que aparezcan náuseas, por lo que pediremos al paciente que se relaje, se eche hacia delante y le pediremos que trague saliva para con este ritmo seguir introduciendo la sonda. Si le costara tragar saliva le proporcionaremos un vaso con agua y una pajita para ayudarle a tragar.
6.Seguiremos introduciendo la sonda hasta llegar a la marca realizada en ella.
7.Durante todo el proceso comprobaremos que no hayan signos de malestar más allá de los normales, como serían tos, disnea o cianosis, si esto ocurriera se retiraría la sonda y se volvería a introducir cuando el paciente volviera a encontrarse bien.
8.Si todo ha ido bien es el momento de comprobar que la sonda está en el interior del estómago, para ello existen tres métodos: observar si sale líquido gástrico espontáneamente a través de la sonda, si no es así el segundo método consiste en aspirar el contenido gástrico utilizando una jeringa de 50 ml, y por último si esto no nos ha servido podemos introducir aire mediante una jeringa a través de la sonda mientras escuchamos con el fonendo apoyado sobre el epigastrio.
9.Cuando hayamos comprobado que la sonda está en el lugar adecuado fijaremos la sonda a la fosa nasal prestando atención a que no se ejerza ninguna presión excesiva sobre ésta.
Seguidamente vimos un vídeo explicativo sobre la alimentación de un paciente mediante el sondaje nasogástrico, en el que se explicaba cómo diluir la cantidad de preparado prescrito en la bolsa de alimentación, seguidamente cómo colocar al paciente en posición Fowler alta, cómo le debemos administrar el alimento preparado de forma que dure el mismo tiempo que una comida normal (que puede a su vez componerse de primer plato, segundo plato y postre, siempre en un tiempo prudente de administración), seguía explicando cómo al terminar de administrarle la alimentación se debe limpiar la sonda mediante agua con una jeringa y por último como pinzar la sonda y así acabar la administración de la alimentación a través de una sonda nasogástrica. Finalmente deberemos registrar el día, hora, y cantidad de alimento administrado.





Bibliografia 10:Hepatitis

Bibliografía 10: La hepatitis.


La hepatitis toxica o también llamada hepatitis inducida por medicamentos, es la inflamación del hígado que ocurre cuando se toman ciertos medicamentos por ejemplo el paracetamol, el uso crónico o desmedido de esta droga produce hepatitis (1).

Sintomas de la hepatitis toxica:


Dolor abdominal, Orina turbia, Diarrea, Dolor de cabeza, Ictericia, Fatiga, Pérdida del apetito, Náuseas y vómitos, Heces pálidas o de color arcilla. (1).

Causas:


El hígado ayuda al cuerpo a descomponer ciertos fármacos, el proceso es más lento en algunas personas, lo cual puede hacerlas más propensas a presentar daño hepático. Incluso pequeñas dosis de algunos fármacos pueden causar hepatitis, aun cuando el sistema de descomposición del hígado esté normal. Las dosis grandes pueden trastornar un hígado normal. El grado de daño habitualmente depende de la edad y el nivel de exposición a la sustancia hepatotóxica. Muchos fármacos diferentes pueden producir hepatitis medicamentosa. (1).

Los analgésicos y los antipiréticos que contienen paracetamol son una causa frecuente de inflamación del hígado. Estos medicamentos pueden causar daño hepático cuando se consumen en dosis no mucho mayores a la dosis terapéutica recomendada, con un consumo superior a la dosis recomendada puede producir daño hepático y con una dosis muy superior puede producir un trastorno fulminante del hígado. (1).

Los antinflamatorios no esteroides (AINES), como el ibuprofeno y el naproxeno, también pueden causar hepatitis medicamentosa. (1).

Bibliografía:

(1)     Fauci, Braunwald, Kasper, Hauser, Longo, Jameson, et al. Harrison. Principios de Medicina Interna. Vol. I. 17ª ed. Leonora Véliz Salazar, Camilo Heras Martínez. México: McGRAW-HILL – INTERAMERICANA EDITORES; 2009.

Bibliografia 9: paciente ostomizado.

Bibliografía 9: Osteomía


El cambio de bolsa de osteomía es una técnica bastante sencilla, sirven para depositar las heces en una bolsa, hay muchos  tipos de osteomías Gastrostomía, Yeyunostomía, Colostomía, Ileostomía, Ureterostomía.

Nos vamos a centrar en el cuidado de las Colostomías en el domicilio del paciente: hay distintos dispositivos de una, dos y hasta 3 piezas, pueden ser abiertos o cerrados.

Material:


Dispositivo de recambio, según el modo de elección para el paciente, comodidad y clase de estoma que porte.

Bolsa de basura: para la retirada del dispositivo.

Guantes desechables no estériles: ya que en el domicilio del paciente es una técnica no estéril.

Esponja suave: para el lavado del estoma y la piel adyacente al estoma.

Agua: Aclarado de la piel.

Jabón neutro: para la limpieza de la piel no irritara la piel.

Toalla: para secar la zona donde se ha lavado la piel y estoma.

Tijeras para recortar el dispositivo/osteoma y poder ajustarlo al estoma.

Procedimiento:


El paciente en su domicilio deberá elegir una habitación idónea para el cambio del dispositivo, donde más cómodo/a este, pero el más idóneo será el lavabo.

Lavado de manos con agua y jabón asegurarse de lavarse los espacios interdigitales y por debajo de las uñas, y secado de manos.

Se procederá a retirar la anterior bolsa, presionando suavemente sobre la piel, con una mano y con la otra retiraremos el adhesivo, y retiramos la bolsa.

Limpiar la piel de alrededor de su estoma con agua caliente y jabón y seque con una toalla limpia.

Revise la piel, debe estar rosada o roja, hay que tener especial cuidado de su color si es de color morado, azul o negro, hay que acudir al médico

El estoma se pude lavar con un desinfectante especial, si la piel está un poco húmeda  hay que rociar un polvo en la parte húmeda del estoma.

Usar la plantilla medidora para encontrar el tamaño del dispositivo, es recomendable que sea un poco más pequeño para evitar fugas.

Pegue la bolsa al adhesivo.

Despegue el papel adhesivo.

Ponga el adhesivo uniformemente alrededor del estoma y sostenerlo durante unos minutos .

Pegue la pinza de la bolsa o use velcro para cerrarla.

Lavado de manos.

Bibliografías:

(1)Versión en inglés revisada por: Jenifer K. Lehrer a. Cambio de la bolsa de ostomía: MedlinePlus enciclopedia médica [Internet]. Nlm.nih.gov. 2015.Disponible en: https://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/patientinstructions/000204.htm
(2)Cmed.es. CMED - Ostomía: causas, dieta y cuidados [Internet]. 2015.Disponible en: http://www.cmed.es/actualidad/ostomia-causas-dieta-y-cuidados_186.html
(3) Enfermeriapractica.com. [Internet]. 2015. Disponible en: http://enfermeriapractica.com/procedimientos/cambio-de-dispositivos-de-ostomia

(4) 15. http://www.chospab.es/mediateca/videos/194/mtodo-de-irrigacin-para-colostoma-continente © 2015 Microsoft Términos Privacidad y cookies Desarrolladores Español. 2015.

Resúmes Esther Bernalte


RESUMEN PRÁCTICA 3.

ÚLCERAS POR PRESIÓN

En esta práctica pudimos contar con la presencia de un enfermero profesional ya experimentado quien expuso el tema de las úlceras por presión, explicándonos los diferentes estadios y el mejor tratamiento, dentro del cual nos enseñó una parte de los diferentes apósitos que existen para el cuidado de las úlceras por presión y cuál es el más indicado en cada ocasión.

ESTADIOS

Fueron explicados de forma breve y sencilla con el objetivo de que fuéramos capaces de reconocer el estadio de una úlcera de forma rápida.

Estadio 1: La úlcera se encuentra en un estado no blanqueante.

Estadio 2: La úlcera ya ha provocado el levantamiento de la piel.

Estadio 3: Se ha levantado la piel pero se ve el interior de la herida de forma más profunda.

Estadio 4: En este último estadio se pueden ver estructuras bajo la piel como huesos o tendones.

TRATAMIENTO

Fue explicado desde las siglas TIME para ayudarnos a acordarnos de la secuencia de los pasos más fácilmente.

T (tejido): en este primer paso tendremos que quitar o desbridar tejido que se encuentre ya sin vida. Comenzaremos limpiando el lecho de la herida irrigando con suero fisiológico, después secaremos suavemente mediante círculos desde dentro hacia afuera.

No usaremos betadine para limpiar la herida, a menos que lo que queramos sea secar la úlcera isquémica para que caiga.

Los diferentes tipos de desbridamiento de tejidos son:

-Cortante: en él se usan antisépticos antes y después de cortar.

-Mecánico: consiste en la abrasión mecánica del tejido necrótico. Son traumáticas y no selectivas, por lo que cada vez está menos recomendada esta técnica.

-Quirúrgico: consiste en la retirada completa del tejido necrótico, pero también puede quitarse parte del sano, pudiendo provocar sangrado.

-Enzimático: se suele usar colagenasa (para eliminar los puentes de colágeno) y es selectivo por lo que no daña los tejidos sanos de alrededor.

-Autolítico: consiste únicamente en la colocación de un apósito que permitirá la consistencia de un terreno húmedo para que la herida cure sola.

-Larval: mediante la mosca del vinagre.

-Osmótico: mediante la aplicación de soluciones hiperosmolares o distintos apósitos.

I (infección o inflamación): se deben vigilar posibles signos de infección que vendrán determinados por ejemplo por un incremento del exhudado y un retraso de la cicatrización de la herida. Hay que prestar atención a su vez a la posible aparición del biofilm el cual impedirá que la herida avance en su cicatrización.

M (humedad): este paso consiste en controlar el desequilibrio de la humedad, vigilando la cantidad de exhudado que desprende la úlcera. Para ello contamos con diferentes tipos de apósitos:

-Apósito de hidrogel o hidrocoloide para un exhudado leve.

-Apósito de alginato para un exhudado moderado.

-Apósito de Foam o espuma para un exhudado alto.

- Los apósitos hidropoliméricos con bordes de silicona son especiales por no causar traumatismos al cambiarlos.

Por otra parte, los apósitos se distinguen en apósitos activos, los cuales actúan sobre la herida o pasivos, que simplemente cubren la herida.

Lo más recomendable es que la cura de la herida la siga la misma persona en todo su trayecto para que así no se cambie cada vez el tipo de apósito.

E (estimulación bordes): en este último paso usaremos diferentes métodos para que los bordes vuelvan a tener vida y la herida termine de cicatrizar. Estos métodos pueden ser injertos, agentes biológicos o reguladores de los factores de crecimiento.

viernes, 13 de noviembre de 2015

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BIBLIOGRAFÍA 10.

HEPATITIS

La hepatitis es la inflamación del hígado que puede causarse por enfermedades autoinmunitarias o por reacciones a medicamentos y toxinas, por enfermedades infecciosas o por virus hepatotrópicos (virus de la hepatitis A, B, D asociado con el B, C y E)

HEPATITIS VIRAL AGUDA

HEPATITIS A

Normalmente se empieza con síntomas de forma brusca como fiebre, malestar general, náuseas, anorexia, orina oscura e ictericia. Cuanta más edad tenga la persona más presencia de síntomas habrá. Los síntomas duran sobre 2 meses. El virus de esta hepatitis no produce hepatitis crónica ni estado de portador.
El periodo de incubación es de15 a 45 días y se transmite por vía fecal- oral.
La ingesta de agua, leche y mariscos contaminados son las formas más frecuentes de infección. No se transmite normalmente por transfusión de sangre o derivados del plasma.

Marcadores serológicos:
- Los anticuerpos contra el HAV aparecen en las primeras etapas de la enfermedad y persisten después en el suero.
- Los anticuerpos IgM aparecen en la primera semana y luego suelen desaparecer.
- Los anticuerpos IgG aparecen después de 1 mes de la enfermedad y pueden persistir años.
- La presencia de anticuerpos IgM indica hepatitis A (IgG sólo informa de una exposición pasada)

Vacunación: existe una vacunación contra la hepatitis A que intenta reemplazar el uso de inmunoglobulinas en aquellas personas con alto riesgo de exposición a este virus.

HEPATITIS B

La infección por este virus puede provocar hepatitis aguda, hepatitis crónica, progresión de una hepatitis crónica a cirrosis, hepatitis fulminante con necrosis hepática masiva y estado de portador. También este virus participa en el desarrollo de la hepatitis D.
El virus de la hepatitis B afecta a más de 350 millones de personas en todo el mundo. A partir de 1980 ha descendido la incidencia en niños gracias a su vacunación.
Su periodo de incubación es más prolongado y los problemas de salud son más serios.
Se transmite por inoculación de sangre o suero infectados. Se encuentra en la mayor parte de las secreciones corporales pudiéndose transmitir por contacto oral o sexual.
Entre los grupos de riesgo se encuentran los drogadictos, personas con parejas sexuales múltiples y hombres homosexuales. También los profesionales de la salud.

Marcadores serológicos:
Los tres antígenos que más se asocian con este virus son los dos antígenos del núcleo o core (HBcAg y HBeAg) y el antígeno de superficie (HBsAg), cada uno estimula la formación d elos anticuerpos específicos (anti- HBs, anti- HBc y anti- HBe).
Tanto los antígenos como sus anticuerpos sirven como marcadores serológicos para seguir el curso de esta enfermedad.

Vacunación:
Protege a largo plazo de la infección por este virus

HEPATITIS C

Causa más frecuente de hepatitis crónica, cirrosis y cáncer hepatocelular.
 Existen por lo menos 6 genotipos y más de 50 subtipos, lo que contribuye a su patogenicidad y a su vez dificulta el desarrollo de una vacuna preventiva, pues puede evitar la mayor parte de los mecanismos defensivos del huésped y fármacos antivirales.
Antes de 1990 la vía más común de transmisión era por transfusiones de sangre, aunque con la implementación de pruebas en los bancos de sangre, en la actualidad se considera que la causa más probable de infección es por la inyección de drogas.
El periodo de incubación está entre 15 y 150 días.
Las personas infectadas suelen permanecer asintomáticas o presentar fatiga o pérdida de peso.

Marcadores serológicos:
La prueba más exacta es la medición de los valores de HCV en suero.
Los anticuerpos contra la hepatitis C no son protectores pero sirven como marcadores de la enfermedad.

He escogido este libro puesto que entre los que he buscado es el que englobaba una mayor información acerca de los diferentes tipos de hepatitis, su sintomatología, marcadores y tratamiento, que era lo que pretendía explicar.

Bibliografía:


Carol Mattson Porth. Fisiopatología. Salud-enfermedad: un enfoque conceptual. 7ªed. Buenos Aires: Editorial Medica Panamericana; 2007. p. 927- 932.

Búsquedas Esther Bernalte

BIBLIOGRAFÍA 9.

 SONDAJE NASOGÁSTRICO

Entre los procedimientos que la profesión de enfermería debe saber realizar se encuentra el de un sondaje nasogástrico, el cual consiste en la introducción de una sonda en el estómago a través de uno de los orificios nasales. Esto puede realizarse para un fin diagnóstico, preventivo o terapéutico, entre ellos se encuentran:

1.      Aspirar el contenido gástrico como son líquidos y gases para:

-         Evitar la distensión abdominal y los vómitos tras una cirujía digestiva por ejemplo.
-         Prevenir en tras una resección gástrica un fallo de la sutura por la presión que ejerce el contenido gástrico sobre la zona de la anastomosis.
-         Analizarlo posteriormente.
-         Controlar la evolución de una hemorragia digestiva alta, es decir, que se produzca en el esófago o estómago.
-         Prevenir una posible broncoaspiración en pacientes que tengan alterada la consciencia o que directamente se encuentren inconscientes.

2.      Alimentar enteralmente al paciente.

3.      Lavar el estómago del paciente.

4.      Administrar fármacos.

Si hablamos de los tipos de sondas que existen diremos que su consistencia y flexibilidad dependen del material con el que se fabriquen. La mayoría de ellas están fabricadas con plástico flexible, tienen una longitud de 90 centímetros, tienen una línea longitudinal radiopaca que sirve para la comprobación radiológica de su localización. Las sondas denominadas de Levin y de Salem son las que se usan con mayor frecuencia y la elección dependerá de la finalidad que se desee llevar a cabo.

1.      Sonda de Levin:

Por una parte, en su extremo distal tiene una luz y varias perforaciones, y por otra, en su extremos proximal dispone de una adaptador que facilita el uso de una jeringa de 50 ml o de un sistema de drenaje o de aspiración. Suele estar indicada sobre todo para la obtención de muestras y la administración de dieta al paciente, a la vez que para drenar el contenido gástrico con una bolsa o un aspirador.

2.      Sonda de Salem:

Tiene además una segunda luz que sirve para fafcilitar la entrada de aire y para realizar lavados gástricos manteniendo la sonda conectada al aspirador. Es la más adecuada para usar un aspirador conectado a una toma central de vacío o para realizar muchas aspiraciones, ya que la entrada de aire evita lesiones de la mucosa gástrica o para que deje de drenar.

Si entramos ya en el procedimiento para realizar el sondaje nasogástrico, estos son los pasos a seguir:

1.      Explicar el proceso al paciente y pedir su colaboración ya que será necesaria.
2.      Proporcionar intimidad mediante una cortina o biombo.
3.      Pedirle que retire su prótesis dental si tuviera una.
4.      Acomodar al paciente en posición Fowler y solocar la toalla protectora sobre su tórax.
5.      Comprobar la permeabilidad de las fosas nasales, examinándolas o pidiéndole que respire cada vez por una. Eligiremos la que permitirá introducir la sonda con mayor facilidad.
6.      Medir la longitud necesaria de la sonda, desde la punta de la nariz hasta el lóbulo de la oreja y desde éste al apéndice xifoides. Marcaremos esta longitud obtenida.
7.      Colocarse los guantes y lubricar el extremo distal de la sonda.
8.      Introducirla por el orificio nasal elegido. Al llegar a la nasofaringe pueden aparecer náuseas, en ese caso se deberá dejar reposar y:
-         Proporcionar un vaso de agua para que mientras el paciente da sorbos se introduzca al ritmo la sonda
-         Si la toma de líquidos está contraindicada, se pedirá que trague saliva.
9.      Continuar introduciendo la sonda hasta la marca realizada previamente.

10.   Observar si existen reacciones del paciente como tos, disnea o cianosis, si es así se retirará la sonda.

11.   Comprobar que la sonda está en el interior del estómago:

-         El líquido gástrico saldrá espontáneamente a través de la sonda.
-         Aspirar el contenido gástrico con una jeringa de 50 ml.
-         Colocar el fonendoscopio sobre el epigastrio e introducir aire mediante una jeringa a través de la sonda, lo que producirá un ruido burbujeante.
-         Comprobación radiológica.

12.   Fijar la sonda vigilando que no se produzca ninguna presión excesiva.

13.   Según la finalidad deseada se deberá:

-         Pinzar la sonda cuando se coloque para la alimentación del paciente.
-         Adaptar la sonda al aspirador
-         Colocar la bolsa de drenaje por debajo del nivel del estómago.
-         Retirar la sonda tras extraer las muestras necesarias si el objetivo era la obtención de jugo gástrico.

14.   Por último se registrará en la historia de enfermería todos los datos de interés sobre el procedimiento y las características del líquido drenado.

Me gustó este libro ya que es una colección de libros que explica los problemas de los pacientes quirúrgicos desde el punto de vista de los patrones funcionales, en este caso desde la necesidad del paciente de nutrición y eliminación, y no sólo como procedimientos que hay que llevar a cabo porque un sistema del paciente esté en peligro, si no desde el peligro de la integridad total de su persona.

Bibliografía:

Oto Cavero, I.,  Sanz Moncusí, M.,  Montiel Pastor, M. Enfermería Médico- Quirúrgica. Necesidad de Nutrición y Eliminación. 2º ed. Barcelona: MASSON; 2003. p. 55- 59.